Personaje 10: Henry Kissinger

Henry Alfred Kissinger: Político de EEUU nacido en Alemania en 1923. Poseedor del premio Nobel de la paz, aunque muy criticado por dar apoyo a dictaduras de todo el mundo y propiciar así genocidios. Uno de los creadores del Club Bildelberg.

Henry Alfred Kissinger nació en Alemania en 1923. Es un político estadounidense.
Kissinger fue asesor de Seguridad Nacional y Secretario de Estado bajo el presidente Richard Nixon, y continuó como secretario de Estado bajo el sucesor de Nixon, Gerald Ford. Kissinger tuvo un papel dominante en la política exterior de Estados Unidos entre 1969 y 1977. Fue galardonado con el Nobel de la Paz 1973 para ayudar a establecer un alto el fuego y la retirada de EE.UU. de Vietnam. El alto el fuego, sin embargo, no fue duradero. Mientras que el otro premiado, vietnamita, devolvio su premio por considerar que no lo merecia por haber retornado la guerra, Kissinger no lo devolvió.

Kissinger favoreció el mantenimiento de relaciones diplomáticas amistosas con las dictaduras militares de derechas en el Cono Sur y otras partes de América Latina. Está acusado de planificar el genocidio de grupos politicos en Chile, y posteriormente, en la Argentina y el Uruguay.

Se acusa a Kissinger de muchas violaciones a los derechos humanos, y de ser instigador de genocidios sistemáticos de grupos políticos. El juez español Baltasar Garzón envió una comisión rogatoria referente a violaciones de los derechos humanos, pero el Departamento del Estado de EE.UU., la rechazó. Existen numerosas iniciativas que persiguen conseguir su procesamiento ante instancias judiciales internacionales, así como la retirada de su premio Nobel.

Henry Kissinger también es uno de los más conocidos miembros del Club Bilderberg junto a David Rockefeller. Ambos colaboraron de pleno en los planes de nacimiento, organización y expansión del Club Bilderberg.

En ocasión del golpe de estado de Argentina, el 24 de marzo de 1976, alentó y apoyó a la Junta militar a que tomara el poder. Lo han acusado de complicidad y del estímulo en la eliminación y "desaparición" sistemática de miles de opositores cometidas por la Junta Militar de Argentina del autodenominado Proceso de reorganización nacional o "guerra sucia" según han denominado varios historiadores. La aceptación de la "guerra sucia" Argentina por parte de Kissinger ha sido confirmada oficialmente por archivos desclasificados del Archivo Nacional de Seguridad de los Estados Unidos. En estos archivos se confirma de Kissinger, entre otras frases hacia la Junta militar en referencia a la guerra sucia: "Si pueden terminar antes de que vuelva el Congreso, mejor."

Tambien se afirma su participación en la organización del golpe de estado contra el gobierno de Salvador Allende en Chile. Se lo acusa además de haber organizado la denominada Operación Cóndor, un plan sistemático de eliminación de opositores dirigido a "combatir el comunismo" en Latinoamérica. Fue sometido a proceso por el asesinato de Comandante en Jefe del Ejército Chileno René Schneider en Estados Unidos , fallando en 2006 la Corte Suprema de ese país que su responsabilidad había sido política y no criminal. Además se afirma su participación en el golpe de estado en Uruguay acaecido en 1973.

Henry Kissinger apoyó al régimen indonesio del general Suharto, acusado del genocidio contra la población de Timor Oriental.

Se conoce su implicación directa en los bombardeos secretos de Laos y Camboya, ordenados sin permiso del Congreso. Dichos bombardeos sirvieron para que los jemeres rojos accedieran al poder, del que se servirían para asesinar a más de dos millones de personas.

Kissinger asesoró y preparó a los marroquíes para la Marcha Verde (1975), y auspició las negociaciones secretas entre los representantes marroquíes y sectores del gobierno franquista, que concluyeron con la lamentable retirada del Ejército español del Sáhara y la ocupación del territorio por Marruecos y Mauritania. EEUU proporcionó a Marruecos logística y armamento, y Arabia Saudí aportó grandes sumas de dinero para esta operación, que favorecía (y aún hoy favorece) a los intereses estratégicos y comerciales de los EEUU, a costa de la libertad del pueblo saharaui. El conflicto del Sáhara Occidental aún no se ha resuelto.